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Detrás del nombre CLODIN

Una historia que se transformó en identidad.

CLODIN no nació de un plan de marketing ni de una búsqueda estratégica.

Su origen es mucho más simple, más íntimo y más humano. 

 

De chica, hasta la actualidad, mis hermanos me empezaron a llamar ¨CLODIN¨, un apodo que surgió de una novela que mirábamos en casa.

 

Ese apodo dejó de ser  un apodo familiar y empezó a tener un significado más profundo.

 

Cuando decidí crear mi marca, supe que CLODIN tenía que ser ese su nombre.

Porque representa lo que soy: Una mujer que transforma lo pequeño en poderoso, lo personal en algo que logre inpirar a otras mujeres.

Soy Florencia, diseñadora de moda e indumentaria, apasionada por el arte de crear prendas que transmitan más que belleza.

 

En cada prenda hay una parte de mi esencia: el amor por el detalle, la búsqueda del equilibrio entre sensualidad y elegancia, y la convicción de que la ropa interior también puede ser una herramienta de empoderamiento.

 

CLODIN es mi historia convertida en marca

NO ES SOLO LENCERIA, ES UNA FORMA DE SENTIRTE PODEROSA.